Salsa Big Mac

Hoy en Cocina con Flory vamos a preparar una de esas recetas que todos hemos querido recrear alguna vez: la famosa Salsa Big Mac, esa mezcla cremosa, ligeramente ácida y llena de sabor que ha conquistado paladares en todo el mundo. Aunque pueda parecer un secreto bien guardado, la realidad es que hacerla en casa es mucho más sencillo de lo que imaginas, y lo mejor de todo es que podemos adaptarla a nuestro gusto para disfrutarla en hamburguesas saludables, wraps, ensaladas o incluso como dip para acompañar vegetales o patatas al horno.
En esta receta te guiaré paso a paso para conseguir una salsa deliciosa, rápida de preparar y perfecta para tener siempre lista en la nevera.

Ingredientes

Para la salsa Big Mac:

• 5 cucharadas de mayonesa
• 1 cucharada de mostaza
• 1/2 cucharadita de ajo en polvo
• 1/2 cucharadita de cebolla en polvo
• 1/2 cucharadita de pimentón
• 1 cucharadita de vinagre blanco
• 1 cucharada de cebolla rallada
• 1 cucharada de pepinillo rallado
• 1 pizca de sal

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Preparación

Paso 1: Preparar la base cremosa

Empieza colocando en un bol amplio las cinco cucharadas de mayonesa. Esta será la base de la salsa y aportará la textura cremosa y el sabor suave característico. Procurar que esté a temperatura ambiente ayudará a que se mezcle todo más fácilmente.

Paso 2: Añadir la mostaza

Agrega la cucharada de mostaza. La mostaza aporta un toque ligeramente picante y ácido que equilibra muy bien con la cremosidad de la mayonesa. Mezcla ligeramente para ir integrando ambos ingredientes desde el principio.

Paso 3: Incorporar los condimentos en polvo

Es el momento de añadir el ajo en polvo, la cebolla en polvo y el pimentón. Estos ingredientes secos son clave para crear los matices de sabor típicos de la salsa Big Mac. Añádelos sobre la mezcla y remueve con una espátula o cuchara hasta que se integren de manera uniforme.

Paso 4: Añadir el toque ácido

Suma una cucharadita de vinagre blanco. Este ingrediente es fundamental para aportar frescura y equilibrar la grasa de la mayonesa. Mezcla bien para que el vinagre se reparta completamente en la salsa.

Paso 5: Incorporar los ingredientes frescos

Agrega una cucharada de cebolla rallada y una cucharada de pepinillo rallado. Estos aportarán textura, jugosidad y ese sabor tan característico que recuerda a las hamburguesas estilo americano. Es importante que ambos ingredientes estén bien rallados o muy finamente picados para que se integren sin que su textura sea demasiado dominante.

Paso 6: Ajustar el sabor con sal

Añade una pizca de sal para realzar todos los sabores. Mezcla nuevamente y prueba la salsa. Si te gusta más intensa, puedes añadir un poco más de vinagre o mostaza según tu gusto.

Paso 7: Dejar reposar (opcional pero recomendado)

Aunque puedes consumir la salsa de inmediato, dejarla reposar en la nevera al menos 30 minutos permitirá que todos los sabores se fusionen mejor y la textura se vuelva más homogénea. Esto hará que el resultado final sea aún más delicioso.

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Cuando tengas tu salsa lista, podrás usarla en hamburguesas saludables, sándwiches, bowls o como acompañamiento para snacks caseros. Es versátil, rápida y perfecta para tener lista en tus comidas semanales.

Si te ha gustado esta receta, no olvides compartirla y seguirnos para más recetas deliciosas. ¡Buen provecho!